CAMBIOS EN EL GABINETE

Anabella Pezet

Estamos a tan sólo dos años y medio de la elección presidencial y el gobierno actual realiza ajustes en dos carteras sumamente importantes para el desarrollo de nuestro país: la de salud y la de energía. Para ello, hecha mano de personajes como José Narro Robles en la Secretaría de Salud, Mikel Arriola como titular del IMSS y José Antonio González Anaya como nuevo Director de PEMEX. Los tres han mostrado una profunda calidad profesional, y así lo reconocen, incluso, los líderes de partidos de oposición.

José Narro Robles es un peso completo en la escena pública, es médico cirujano, académico y político que dirigió por ocho años la máxima casa de estudios de los mexicanos, la UNAM. Con gran sentido del humor, Narro conoce las entrañas del sector salud de nuestro país. En su momento se le candidateó para ser Secretario de Educación Pública o el primer Secretario de Cultura de México.

El primer reto que tiene Narro Robles como Secretario de Salud es blindar la visita del Papa Francisco con los operativos que debe de implementar en todas las zonas que visitará como Chiapas, Michoacán, Ciudad de México, Estado de México y Chihuahua contra el virus del Zika, dengue y Chikungunya. A través de fumigaciones aéreas y el establecimiento de laboratorios en las ciudades de visita, la Secretario implementará todo un equipo para detectar cualquier posible brote que pueda poner en riesgo el evento o la salud de los visitantes.

Por su parte, Mikel Arriola ha mostrado ser uno de los funcionarios más eficientes en el gobierno. Forjado dentro de las filas de la Secretaría de Hacienda, recuerdo a Mikel cuando acudía constantemente al Congreso a cabildear reformas que le competían a la Secretaría. De ahí el gobierno de Felipe Calderón lo nombró titular de la Cofepris, lugar donde comenzó a tener un destacable desempeño.  

Con el cambio de gobierno, prácticamente todo el sector de los laboratorios farmacéuticos, tanto mexicanos como extranjeros, cerraron filas para solicitar su permanencia en el cargo, cosa que sucedió y fue ratificado. Mikel habría reducido drásticamente los tiempos de espera para obtener permisos para la venta de productos de salud que en otros países ya eran reconocidos. Asimismo, realizó diversas incautaciones de productos apócrifos en el mercado, cerró varias clínicas de salud “patito”, y combatió drásticamente los llamado “productos milagro”. De todo ello dio cuenta su magnífico equipo de comunicación social.  

Por otro lado, Mikel dejó un legado importante dentro de la Cofepris con el tema del uso de la cannabis para fines lúdicos en México, tema que hoy ocupa uno de los primeros lugares en la agenda de debate nacional.

Quizá el relevo en el gobierno federal más esperado se dio con la salida de Emilio Lozoya de la Dirección General de Pemex. Meses atrás ya se escuchaba el nombre de José Antonio González Anaya para relevarlo.

José Antonio también ha sido otro de los funcionarios públicos que por su extraordinaria labor ha sido ratificado por el gobierno del Presidente Peña Nieto. De corte técnico y teniendo estudios de postgrados en Harvard, José Antonio llega a Pemex en uno de sus peores momentos.

Hace algunos días, el Banco de México, comandado por el Doctor Agustín Carstens señaló que se deben hacer ajustes en las finanzas públicas, incluyendo en la paraestatal. La Secretaría de Hacienda, por su parte, ha señalado que está dispuesta a inyectarle recursos, es decir a rescatarla, siempre y cuando eficiente sus gastos y costos. Es hora de apretarse el cinturón.

Dentro de esa eficiencia, Pemex tiene que recortar en este 2016 un total de 10 mil plazas, aunado a las otras 15 mil que recortará el Gobierno Federal. Al cierre del 2014, el reporte anual de Pemex registraba más de 153 mil empleados.

El gasto público debe reflejar la caída de los precios del petróleo a nivel internacional. La mezcla mexicana ha caído hasta en un 70% de su costo, hasta alcanzar precios mínimos desde hace 12 años. De hecho diversos analistas del sector financiero no ven un rebote más allá de los 25 dpb en el corto plazo.

Además de la caída en los precios, Pemex también ha enfrentado una baja importante en su producción. De hecho ha sido la producción más baja registrada en los últimos 25 años, al caer 6.6% respecto al año anterior. En 2015, la extracción de petróleo fue de 2.26 millones de barriles en promedio, lo que se traduce en una caída del 31% en la última década. Asimismo, la perforación de petróleo en este último año descendió hasta en un 50%.

De acuerdo con El Economista, las tomas clandestinas en 2015 aumentaron hasta en un 51% en comparación con el año pasado, y “si se comparan con el 2006, el número de denuncias se ha incrementado 26 veces”.

¿Por qué llamar a José Antonio González Anaya al rescate de Pemex? porque como Director General del IMSS redujo el déficit financiero de dicha institución a menos de la mitad en los primeros tres años de este sexenio. Asimismo implementó mejores sistemas de fiscalización y formalización del empleo que se tradujo en un incremento de 9 mil millones de pesos en el mismo período. También logró el ahorro de 10 mil millones de pesos en compras consolidadas de medicamentos que se dio en el sector salud, además de incentivar la competencia para ofrecer los precios más bajos del mercado.

Excelente decisión tomó el gobierno federal en estos tres nombramientos. Habrá de seguirles las pisa muy de cerca de los tres funcionarios, pues se espera que logren alcanzar resultados muy pronto.

PENDIENTES

Pendientes están los nombramientos del Director General del INFONAVIT, ya suena el nombre del Senador David Penchyna; de la PROFECO, donde se requiere un abogado con experiencia, se dice que uno de los allegados a Beltrones podría ocupar esa silla; está pendiente el nombramiento en la Subsecretaría de Prevención y Participación Ciudadana de la Secretaría de Gobernación, donde las asociaciones civiles piden sea la actual Directora General de la Coordinación Intersecretarial para la Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia, la doctora Eunice Rendón, quien ya estuvo como encargada de ese despacho donde hizo un extraordinario trabajo; y ahora la propia COFEPRIS que se queda acéfala, donde se dice que la senadora Cristina Díaz podría  ocupar ese lugar.